viernes, 1 de enero de 2010

Caínito

Este día, uno o seis, que más da.
Arrastrando los pies pegados al suelo, no vaya a derrapar la rueda, se lo que se, no se muchas cosas, las mentiras a veces son piadosas, la luna llena llenó de noche la noche misma.
Silbando, el otro día me comunique silbando y tocando una bocina instalada en uno de los mofletes de mi culo, me embriago la risa, me miraron las chicas, alguna me hizo hablar, cambiante como el clima, será mi lado femenino desarrollado.
Salir con el cigarro encendido, las gafas de ver a traves de los cuerpos, puesto de música hasta las orejas, un susto y todo es bueno de pronto, caín, descalzo.
Un desprecio, un odio de adentro, que malo es no poder perdonarse.

No hay comentarios:

Publicar un comentario